Todo lo creado es la evidencia más contundente de que Dios existe. El querer negar esta verdad es como cerrar los ojos para no ver o taparse los oidos para no ir.

Romanos 1: 20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

Entonces, ¿Porqué el hombre se empecina en no creer?

El hombre se siente más cómodo con sigo mismo, pensando que no tiene que rendirles cuentas a nadie, por lo que no quiere sentirse "mal" haciendo las cosas que le gustan hacer, aunque no sea de su provecho y el admitir que hay un Dios justo y santo, les estorba. Por lo que nuestro rebelde corazón se inclina siempre a hacer lo que nuestros miembros quieren arrastrarnos a hacer.

Al final, a quien le conviene hacer lo que Dios manda, es a nosotros mismos. Quiero que analicen las siguientes preguntas:

  • Acaso, es a Dios que le conviene que seamos santos?
  • ¿No será a nosotros, que siendo humildes de corazón, aceptando nuestra débil condición, recibimos la bendición de la Salvación eterna de manera gratuita?
  • Luego de la Salvación por Gracia, ¿No tenemos comunión directa con el Padre a través de Jesucristo, y cuando nos acercamos y le dedicamos tiempo a Dios, él nos abre las ventanas de los cielos para derramarnos bendiciones?
  • ¿No es sólo por medio de Jesus, que toda la paz que sobrepasa todo entendimiento lo obtenemos en medio de las tribulaciones?
  • ¿No es donde Jesús que podemos descargar nuestra carga?
  • ¿No es el Señor quien renueva nuestras fuerzas?
  • ¿No es Dios quien promete que todo lo que le pidamos en el espíritu, nos lo concederá?

Les invito a ver el siguiente video, donde podemos apreciar las maravillas de todo lo Inteligentemente diseñado: